Carlos Emilio:
Después de mucho me decido a escribir para mi blog, y así, hacerlo por vez primera para ti.
¿Sabes?, una preocupación mayúscula anda rondando mi mente.
Y voy a tratar que este medio sea un catalizador de la misma.
A partir de ahora cuando queramos lavarnos las manos papá, mamá y tú vamos a ponernos en fila uno detrás de otro, primero mamá, porque es la dama de la casa, luego tú, porque primero mujeres y niños, y luego papá.
Cuando vayamos a almorzar, tú y yo vamos a pararnos de manera ordenada, para que mamá nos dé la delicia que vayamos a comer.
Ese tipo de organización se llama cola, y hay que ir preparándote.
De hecho me interesa que conozcas la fórmula, porque cuando vayamos a comprar nos vamos a repartir uno en cada caja para poder comprar un kilo de azúcar cada uno, ah, y si te doy una lata de espárragos es sólo para que te acostumbres, así cuando nos den a comprar algo de más no se te haga complicado entender.
Otra cosa mi amor, no es que no podamos comprar pan del día. El hecho que compremos pan cada cinco días es para que se enfríe y esté duro, de esa forma te vas acostumbrando a lo que yo conocí como pan popular.
Pero, en realidad prefiero eso a que tengas que hacer IPM, o tener que soportar viejos resentimientos que nada tienen que ver con tu inocencia.
Y menos con la intolerancia esa de los fusilamientos.
Hijo mío, a ver cómo la pasamos estos cinco años que se vienen y por lo pronto, el voto es secreto compañeros.
CARLOS E. MONTALVÁN
jueves, abril 27, 2006
Suscribirse a:
Entradas (Atom)